Las dos grandes divas nacionales están que arden, pero por motivos muy distintos. Susana Giménez tuvo picos de casi 33 puntos de rating en su debut del domingo pasado por Teleocho y su doble, a cargo de Anita Martínez, le dio a Marcelo Tinelli uno de los momentos con mayor audiencia del envío del lunes: el ingreso de la diva a la casa de “Gran cuñado VIP” marcó 23,6 puntos para Canal Trece (Doce en Córdoba) y el personaje se mantuvo en una caricatura simpática, sin excesos ni derrapes. Esa era una de las preocupaciones de Susana, que advirtió a Marcelo que si su parodia no le gustaba o si empezaban a maltratarla en el reality humorístico, ella misma se iba a encargar de que hubiera una imitación de Tinelli en su programa.
La imitación se redujo a juegos con declaraciones del tipo “A Rama me lo comí como un chocolate. Importante: el que mata tiene que morir, el que usa barbijo debe estar aislado, el que escucha un disco de Zulma Lobato tiene que tener huevos, el que cruza una avenida de dos manos tiene que mirar a ambos lados, y el que come y no convida tiene un sapo en la barriga”. Por ahora, sin provocaciones.
Mientras, Moria Casán sigue con la guardia en alto desde su pelea con Antonio Gasalla y tira munición pesada cada vez que le prenden la cámara. Con Luis Majul, en La Cornisa, dijo “Yo les saqué las caretas a todos estos”, en referencia a los que define como sus “enemigos”. “Me fui a Europa para alejarme de la mediocridad, nunca me pasó algo así, creo que todos los que hablaron de mí lo hicieron porque tenían algo conmigo, envidia o como quieran llamarlo”, despachó, y dijo que Mirtha no contestó “porque no le da la cabeza para meterse, entonces lo lleva a Tribunales”. Sobre el silencio de Susana sobre el tema, dijo que la entendía porque hace mucho que trabaja con “esa persona”, en referencia a Gasalla.
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